lunes, 3 de enero de 2011

Discurso al Consejo Directivo

Reforma de las Juntas Departamentales

Para comenzar, quisiéramos remontarnos a los orígenes de este debate, gracias a los cuales hemos llegado a este punto aquí hoy. En este sentido, es difícil establecer con precisión un momento claro en el que se inicia el debate, puesto que la reforma de las juntas ha estado durante muchos años presente como tema pendiente en la agenda de debate político de la facultad. Sin embargo, nunca antes pudieron darse las condiciones concretas que faciliten el tratamiento del tema, durante largo tiempo no existió la suficiente voluntad de las distintas partes para favorecer este necesario intercambio. A fines del año 2008 estas condiciones comienzan a ser posibles, cuando las diferentes comisiones de estudiantes por carrera de la facultad, decidimos conformar el espacio de coordinación Intercomisiones, y retomando los aportes que anteriormente hicieron los compañeros y compañeras que fueron delegadas estudiantiles de la junta de sociología durante el período 2005-2007, nos dispusimos a trabajar para reformar y democratizar las juntas departamentales.

Es desde aquel momento que creemos fue posible ir generando las condiciones para poder discutir un proyecto colectivo. Durante alrededor de un año y medio pudimos darnos entre nosotros las discusiones necesarias que nos permitieron consensuar un proyecto de reforma cuyo objetivo fue abrir la discusión a los distintos claustros de la facultad. En la presentación del proyecto que hicimos a principios de año, evidenciamos un positivo cambio de actitud de los distintos actores políticos de la institución, de tal modo que fue posible iniciar el debate institucional por la reforma de las juntas.

En nuestro discurso del consejo directivo de abril, en el cual fue electo el nuevo decano, hicimos hincapié en esta cuestión, en una valoración positiva del funcionamiento político que venía llevándose adelante en la facultad, que se expresó no sólo en este debate sino en otros que pudieron también darse a lo largo del año, como la reforma del Régimen de Enseñanza y Promoción. Además, partimos de la caracterización de que los cambios que pedíamos tenían un correlato en las prácticas que ya se estaban dando desde hace un tiempo en la facultad, por eso nuestros objetivos se orientaban a otorgarle un marco institucional a estas prácticas.

A partir del consejo de abril se conformó una comisión ad hoc del consejo directivo para la reforma de las juntas, la cual a lo largo del año se constituyó como un espacio de articulación interclaustro basado en una lógica de construcción y consenso. Por supuesto, se evidenciaron y contrastaron distintas opiniones acerca de cómo entendía cada uno la institución, más de una vez los debates se volvieron espinosos y de a ratos se estancaban. No obstante, siempre se mantuvo el rumbo y la voluntad de encontrar un solución conjunta a partir de las distintas perspectivas y demandas de los claustros.

De este modo, pudimos avanzar conjuntamente sobre los tres puntos que creíamos esencial discutir:

- En primer lugar, el punto central de nuestras demandas fue transformar el carácter consultivo de las juntas, en función de abandonar el carácter meramente “consultivo” de las mismas y traducir reglamentariamente el protagonismo que ya venían ganando éstas en los departamentos. De este modo, en clara dirección de ir profundizando y ampliando los espacios de participación política de nuestra facultad, logramos alcanzar un consenso determinante: las juntas son instancias de referencia insoslayable en los departamentos y su función es asesorar directamente al Consejo Directivo en las cuestiones pertinentes a cada carrera. En la confluencia entre las juntas y el Director del Departamento se dirime la agenda político-académica de los departamentos.

- En segundo lugar, avanzamos en darle un contenido concreto a la afirmación recién expuesta, haciendo partícipes a las juntas de la discusión sobre los lineamientos generales que cada departamento debe priorizar durante los años que dure cada gestión del mismo.

- Por último, modificamos la composición por claustro de las juntas. De este modo, logramos un doble objetivo: por un lado, logramos avanzar hacia una composición más equitativa y equilibrada, en la cual ningún claustro puede por sí solo imponerse sobre el resto. Por otra parte, la nueva composición amplía el horizonte de construcción de la junta para atender las demandas de cada claustro en función de incorporar nuevas voces y actores al debate político-institucional.
Desde nuestro claustro, creemos que hemos estado a la altura de las circunstancias. Esta discusión nos encontró como un claustro con un compromiso real para discutir y construir la institución, para defender y profundizar las múltiples conquistas alcanzadas por todos y todas, y para disputar en función de transformar lo que consideremos necesario, para seguir avanzando en este proceso de democratización. Pero además, este debate también nos demostró un gran compromiso y apertura al debate de parte de los otros claustros y actores institucionales. Como ya dijimos, esta lógica de articulación y construcción colectiva ya estaba funcionando en la facultad desde hace tiempo, por eso es que esta reforma viene no sólo a otorgarle un marco institucional sino a generar espacios para reforzarla y profundizarla.

Para finalizar, creemos sumamente importante no desentendernos del marco político universitario en el que se desarrolla esta reforma. Es de este modo que consideramos que, así como hemos logrado dar avances significativos en relación a nuestras formas de construcción y articulación, en otros ámbitos no hemos logrado avanzar en esa misma dirección, como demuestra el conflicto por la reforma del comedor. Lamentablemente, tenemos que asumir con madurez que esta experiencia hoy no es posible extrapolarse a nivel de la universidad, donde creemos se han privilegiado lógicas de construcción propias de sectores contra los cuales todos afirmamos estar unidos y unidas. Esto no quita méritos al trabajo realizado, sino por el contrario: refleja la importancia del trayecto que hemos transitado hasta ahora, y refuerza nuestra convicción de la necesidad de ampliar y profundizar este camino, en función de transformar y construir la universidad que realmente queremos.

Intercomisiones
15/12/2010

1 comentario:

flor dijo...

ey! leí el documento sobre la reforma de las juntas y realmente se notó el trabajo que se dieron en la comisión debatiendo y luego sistematizando los puntos de vista ... muchas gracias y muchas felicitaciones al trabajo de las compañeras y los compañeros que participaron de ese espacio